El té es una alternativa para coadyuvar con el tratamiento de la ansiedad.
Es una de las bebidas más consumidas y antiguas del mundo, teniendo su origen en China.
El té es una bebida ancestral, altamente curativa, gracias a sus beneficios y propiedades. Muchos de sus beneficios se encuentran en la gran cantidad de antioxidantes, vitaminas, minerales y fibras que son provechosas para el organismo.
Desde épocas primitivas, los brebajes, té o infusiones, eran utilizados para el tratamiento de enfermedades y padecimientos, como una práctica de la medicina ayurveda o herbolaria.
Lo cierto es que, la naturaleza provee maravillosos regalos a la humanidad y uno de ellos es la capacidad de curación por medio de sus recursos.
Ahora te dejo una breve lista de diferentes tipos de té para calmar la ansiedad:
- Té de ashwagandha: contiene sustancias químicas que podrían ayudar a calmar el cerebro, a reducir la hinchazón (inflamación) y a disminuir la presión arterial.
- Té de toronjil, manzanilla o lavanda: por sus propiedades relajantes, tiene un efecto sobre el sistema nervioso central que disminuye el estrés y la ansiedad.
- Té de valeriana: actúa como sedante, antidepresivo natural y como equilibra la presión arterial gracias a sus propiedades.
- Té de pasiflora o hierbabuena: alivia el nerviosismo y favorecer el sueño gracias a sus principios activos.
- Té de hierba de San Juan: aumenta los niveles de serotonina en el cerebro. Siendo esta una sustancia vital para que las células nerviosas y el cerebro funcionen.
Agrega un poco de tu endulzante favorito y siempre visiona tu bienestar en cada sorbo que te tomes.
El té para calmar la ansiedad en conjunto con otras prácticas como meditar, terapia entre otras puede ayudarte a no colapsar.
Siempre buscaré instruirte en prácticas saludables y naturales que te ayuden a estar bien, sanando desde adentro para que puedas trascender. Aquí te dejo varios artículos que te ayudarán para que ambientes tu casa en pro de generar bienestar, buenas energías, lo acompañes con una meditación y puedes terminar con una taza de té.
Mi misión es ayudarte a sanar.